Javier es un hombre del remanente, que tenía años en el ICOC pero que se cansó de la tibieza espiritual y respondió al llamado que Dios le hizo de ser un discípulo completamente comprometido, el cual le llevó a unirse al nuevo movimiento de Dios, y la Iglesia Cristiana Internacional "City of Angels" (liga en inglés). Nacido de padres mexicanos aquí en los Estados Unidos, Javier habla el inglés y el español. El llegó a la iglesia aquí en el ministerio en inglés pero vino a pasar un tiempo en el ministerio latino antes de irse, para entrenarse y prepararse a estar haciendo todo en español.
Pues es un joven de gran fe y lo vamos a extrañar. Y tan pronto que llegó se puso a trabajar y nos reportaron ayer que en menos de quince días en Chile ¡ya bautizó su primer invitado! ¡Qué sigas así brother!
Hablando de la iglesia de Santiago, Chile, Matt Sullivan, el evangelista que la dirige, me mandó un email hace unos días con muy buenas noticias de varias otras personas que se están bautizando en ésos últimos días allá.
Matt es un gran amigo mío, y un hombre de mucha valentía. (Sabías que los "discípulos" cobardes no van a ir al cielo? Apocalipsis 21:8) Matt dejó toda su vida, su comodidad, su pueblo, sus amistades de muchos años, su seguridad económica (eso diría uno que no conoce a Dios), y muchas otras cosas para mudarse a formar parte del nuevo movimiento con nosotros en Portland, Oregon ya hace unos añitos atrás, llegando un poco antes que yo. Luego Matt e yo fuimos juntos con un equipo para empezar una neuva iglesia en Phoenix, Arizona - Matt dirgiendo el equipo misionero y el pequeño ministerio en inglés, mientras yo dirigía el más pequeñito ministerio en español. Fue muy controversial para muchas personas porque fue la primera vez en nuestro nuevo movimiento que empazamos una iglesia donde ya existía una iglesia del ICOC. Pero Dios bendijo y ahora me inspira mucho ver todo lo que Dios ha hecho y sigue haciendo en la iglesia de Phoenix (liga en inglés, disculpas), especialmente en su ministerio de universitarios, donde han crecido de algo como 5 a 30+ discípulos de Jesús completamente comprometidos en un solo año. Yo no dudaba ni un minuto en ir, por motivos que voy a exponer en otra entrada.
Pero Dios ha andado moldiendo al carácter de Matt por medio de las circunstancias y el discípulado de hombres como Kip McKean, y preparándolo para responsabilidades cada vez mayores. ¡Saludos a Matt, a Javier, y a todos los hermanos en la iglesia de Chile!
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